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Y ya no hay más vuelta que darle, así terminó la entrada anterior y da inicio a la de hoy.
Verdaderamente toque fondo, iba decidida a (si ayer te cruzaba) decirte todo lo que me pasa/pasaba.
Te crucé, hablamos pocas palabras y esas pocas palabras me dijeron tantas cosas, que me hicieron entrar en razón. Y caí, no sos el "hombre perfecto" que yo creía, si no el resentido que busca refugio en cualquier mina y se ríe de lo que no da gracia con tal de ser un poco más feliz. Estabas muy creído y la verdad que todo lo lindo que me gustaba de vos en segundos al escucharte, un flash pasó por mi cabeza y me dije: ¿Esto es lo que yo tanto estoy esperando?, ¿Me merezco esto?, ¿Porque estuve tan ciega y no quise entender?.
Ahora, me alegro de no haberte dicho nada, porque no puede funcionar, es mejor que cada uno siga en la suya, como lo hicimos hasta ahora.
Pasado pisado, arriba la cabeza que de amor nadie muere, soy muy chica y tengo que disfrutar, me hago rollos que me los tendría que dejar para que cuando tenga 35 y, si llegue a estar sola, ahí si me lo planteo ahora no.
Chau, no pienso escribir más sobre vos, evitar que vuelvas, ya está.
Se va mayo y se va con vos..

Te deseo suerte y que te vaya bien!